Introducción

Europa es un continente diverso lleno de diferentes culturas, idiomas y tradiciones. Además, también tiene una amplia variedad de capitales con distintos atractivos turísticos y económicos a la hora de viajar. En este artículo vamos a descubrir cuáles son las capitales europeas más económicas para viajar.

Paris, la ciudad de la luz

Paris es conocida como la ciudad del amor y uno de los destinos turísticos más populares de Europa. Sin embargo, su fama de ser una ciudad cara puede que no sea del todo cierta. Es cierto que hay lugares que pueden resultar bastante caros, pero también hay opciones más económicas. Si eres amante del arte, no te puedes perder el Museo del Louvre, que es uno de los más importantes del mundo y que alberga obras como la Mona Lisa. Además, es gratuito para los menores de 26 años y el primer domingo de cada mes. También puedes disfrutar de una tarde en los Jardines de Luxemburgo o dar una vuelta en barco por el Sena. En cuanto a la comida, puedes encontrar opciones económicas en los innumerables puestos callejeros de crepes o baguettes, además de los mercadillos de comida que se celebra en la ciudad. También puedes ahorrar en el transporte si te decides por el billete de metro de un día.

Atenas, cuna de la democracia

Athenas es una de las ciudades europeas más antiguas y llenas de historia y mitología. Pero además, es una ciudad que resulta bastante económica en comparación con otros destinos. Los monumentos más famosos de Athenas, como la Acrópolis, son de acceso gratuito el primer domingo de cada mes, y puedes recorrer la ciudad a pie disfrutando de sus calles estrechas y sus mercados locales. Eso sí, si vas en verano, no olvides llevar agua suficiente. La comida griega es maravillosa, y podrás disfrutar de los platos típicos en multitud de tabernas y restaurantes a precios bastante razonables. Además, si eres de los que disfruta del ambiente, la capital griega tiene una animada vida nocturna.

Budapest, joya del Danubio

Budapest es una ciudad increíble con una arquitectura impresionante, baños termales y una gastronomía sorprendente. Y además, es una de las capitales europeas más económicas para visitar. Para disfrutar de vistas panorámicas de la ciudad, puedes subir a la colina del Castillo de Buda y disfrutar de sus calles empedradas. También puedes bañarte en los baños termales de Gellért, Szechenyi o Rudas por un precio muy asequible. Y si quieres darte un homenaje gastronómico, no dejes de probar el goulash, una especie de estofado que es uno de los platos más típicos. En cuanto al alojamiento, Budapest tiene una gran oferta de opciones a precios muy atractivos, tanto hostales como hoteles. Y para movernos por la ciudad, podemos optar por utilizar el tranvía, una forma muy cómoda y económica de conocer la ciudad.

Praga, la ciudad dorada

Esta ciudad encantadora es uno de los destinos más populares de Europa y también es una de las más económicas. Su centro histórico, que ha sido declarado patrimonio de la humanidad, es una auténtica joya que no deberías perderte. Para disfrutar de vistas del puente de Carlos o de la plaza de la Ciudad Vieja, puedes subir a la Torre del Ayuntamiento por un precio bastante asequible. También puedes visitar la Catedral de San Vito, que es impresionante y de acceso gratuito. En cuanto a la comida, Praga es famosa por su cerveza y puedes encontrarla muy barata en cualquier bar local. Sin embargo, la comida checa en general no es muy cara, y puedes disfrutar de platos típicos en muchos restaurantes a precio muy razonable.

Lisboa, la ciudad de las siete colinas

Lisboa es una de las ciudades más antiguas de Europa, con calles empedradas y una arquitectura impresionante. Además, es una de las ciudades más económicas para visitar en Europa. Una de las visitas obligadas es el barrio de Alfama, considerado uno de los barrios más antiguos de Europa. También puedes disfrutar de la Torre de Belém, una torre de defensa que se encuentra junto al río Tajo y que es una auténtica maravilla. La comida portuguesa es increíble, y en Lisboa puedes disfrutar de platos típicos como el bacalao o los pasteles de nata a precios muy razonables. Y para moverte por la ciudad, puedes optar por el tranvía, una forma única y divertida de conocer la ciudad.

Conclusión

Como hemos visto, existen muchas opciones de destinos europeos para visitar de una forma económica. Paris, Athenas, Budapest, Praga y Lisboa, son algunas de las ciudades que hemos destacado por su relación calidad-precio. En resumen, con una buena planificación y una búsqueda adecuada, podemos encontrar opciones de alojamiento, transporte, comida y entretenimiento que se adapten a cualquier bolsillo. Así que, si estás pensando en visitar alguna de las capitales europeas más económicas, no te lo pienses dos veces y lánzate a la aventura.